viernes, 16 de mayo de 2008

Gatos mantenidos



Tengo un par de amigos con gatos. Uno de los caninos es una gata persa, llamada Aida, y otro canino es un gato de payés, llamado Max. De momento los gatos no se conocen, ni he organizado una cita a ciega con ellos. Un día de éstos montaré el Primer Encuentro de Amigos con Gatos para que sus dueños puedan poner en común las andanzas de sus felinos: si se comen las plantas, si maullan por las noches, si arañan, si son independientes, sin son sibaritas etc. A mi uno de ellos me ha ofrecido un cachorrrillo. Yo quizás me lo pensaría si el gato me paga la mitad del alquiler, me ayuda en las tareas doméstica, y me deja para mi sólo el sofa, que por eso curro todo el día. Atenta contra mi dignidad de animal laboral tener otro animal, que por el solo hecho de ser gato, sea un mantenido. Carles Valls dixit.