martes, 16 de diciembre de 2008

Decimonónico


Ya tengo un décimo de la Lotería (y voy a compartir la fortuna con una serie de amigos desheredados). No voy a decir el número no sea que luego toque y me asalten el blog. La ludopatía en Navidad siempre genera ilusión. La crisis económica nos apedrea y los ciudadanos nos conformamos con que nos toque la pedrea. La ilusión de ganar nos hace ilusamente ricos. Carles Valls dixit.

Sentencia ganadora


Qué mejor que llevar un abogado un divorcio de mutuo acuerdo si quiere ganar un pleito. Se firma por los cónyuges el Convenio regulador y, luego el juez, a ojo de buen cubero, le da el visto bueno y, en unas semanas, ya tienes la sentencia calentita en el despacho. Hoy he ganado mi primer pleito y ha sido cargándome un matrimonio. Un matrimonio multicultural, mestizo e internáutico que se ha ido al garete al cabo de tres años. El matrimonio no ha aguantado los cuernos de la Globalización. Carles Valls dixit.

lunes, 15 de diciembre de 2008

Victoria lluviosa


Los partidos de fútbol también son partes meteorológicos. En el encuentro con el Real Madrid en el Camp Nou la lluvia también jugó su papel mojado. Estar en el estadio viendo el match agazapado a un paraguas, con los pantalones empapados y el frío que te cala todo el cuerpo, también tiene cierta épica. Quizás, por eso, cuando marcó el Barça a menos de diez minutos del final, los allí presentes tuvimos una doble explosión de alegría. Metimos un gol al Madrid y a la maldita lluvia. Cuando se gana hace buen tiempo en el estadio. Carles Valls dixit.

Patologías cerebrales


El cerebro puede jugarte malas pasadas: esquizofrenia, depresiones, obsesiones, autismo, etc. De momento mi cerebro funciona bien y piensa lo que le da la gana. El intestino de la cabeza es más importante que el del vientre. Soy un cerebro con extremidades. Carles Valls dixit.

viernes, 12 de diciembre de 2008

Embebesado


Ya tengo las fotos de mi nueva sobrinita. La verdad es que casi todos los sonrojados bebés me parecen bastante iguales, tal vez el color de los ojos, la pequeña mata de pelo sean algunos rasgos distintivos a destacar. No es hasta que salen en la foto con sus padres cuando ya estoy seguro de que ese bebé sea de mi familia. También es verdad que los ancianos muy viejos también se parecen entre ellos. Cuanto más jóvenes y más viejos más parecidos somos, ¿o no? Carles Valls dixit.

Paternalismo laboral


De momento no he recibido el Lote de Navidad ni la invitación de ninguna Cena de empresa. Reconozco que me he acostumbrado a este paternalismo corporativo en forma de jamón, turrón y cava y convite institucional. El Lote es la prueba material de que todavía estás en la nómina de la empresa y la Cena el símbolo social de que formas parte de la plantilla. Sin Lote ni Cena tienes la sensación de ser un autónomo navideño. Carles Valls dixit.

Despelote en la red


No eres singular en Internet si no estás de alta en el Facebook. Hay ciberpersonas que se preocupan más de crearse un personaje atractivo en esta red social que de su vida real que está desconectada. Por eso, tienen colgados albumes de fotos, han agregado a decenas de novísimos amigos y comentan con todo lujo de detalles sus aficiones e intimidades en abierto a casi todo el público global. Internet es una fábrica de personajes sociales. Carles Valls dixit.


Noventa minutos


La eterna rivalidad es la épica del fútbol. Este sábado se enfrentan el Barça contra el Real Madrid y espero ansioso este match con ilusión enfermiza. Algunos medios de comunicacion ya han vendido la piel del oso por goleada a favor de los azulgranas sin haber disputado el partido, yo soy más prudente. Hay mujeres fundamentalistas que no entienden esta pasión desaforada por dicho deporte. Sin embargo, no es sólo un partido de fútbol, es mucho más porque es pasión. La pasión hay que avivarla, sea con el fútbol, viajando, bailando o soñando. No me averguenzo de tener pasiones de masas. Sin fútbol, mi vida no tiene sentido noventa minutos. Carles Valls dixit.

jueves, 11 de diciembre de 2008

ONG de millonarios


Futbolistas, actores, cantantes se han apuntado a la moda solidaria de crear fundaciones, colaborar con ONG, salir en calendarios coloristas, visitar hospitales de niños, hacer reportajes fotográficos en Africa, y todo esto me parece muy bien desde un punto de vista moral, si se hace de buena fe y no sólo para blanquear su imagen mediática. El rostro de un famoso siempre venderá más en una campaña solidaria que la de un ciudadano cualquiera. Sin embargo, su modelo de vida de enriquecimiento fácil y su sueldos hipermillonarios no encajan bien con valores como la lucha contra la pobreza, el hambre o la explotación infantil. Es una forma de caridad millonaria que no tiene nada que ver con la justicia material, ni con la solidaridad real. Sirve para limpiar sus consciencias de nuevo ricos a cambio de un poco calderilla en forma de fotos satinadas. Un millonario no es un ejemplo de solidaridad. Carles Valls dixit.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Series de ficción


La ficción es adictiva. Cada semana me trago por la tele una serie pueblerina antes de dar las buenas noches a la almohada. Debe ser la combinación del mullido sofá, las neuronas caídas y la ñoña y curiosidad, lo que me encadena a esos personajes esterotipados y sus vivencias guionizadas. La gran ficción es el sueño. Carles Valls dixit.

Seísmo nasal


Estornudas, luego estás resfriado. La epidemia de fluidos nasales invade nuestras fosas. Nuestro mundo es un pañuelo, un kleneex. Un terremoto de mocos sacude el cuerpo en cada sísmico estornudo y el resfriado toma posesión de nuestro organismo. El único exorcismo es a base de paracetamoles. La nariz es lava fría. Carles Valls dixit.

martes, 9 de diciembre de 2008

Caravanas


Ser víctima de una caravana en la carretera es el peaje que pagamos por coger el coche un fin de semana largo. Toda escapada empieza con un éxodo multitudinario de turismos y la operación retorno es un calvario de gasolina en movimiento. Los viajeros rodantes sufrimos el internamiento entre cuatro puertas y la impasible parálisis de la columna rodante. Todoterrenos, deportivos o coches familiares, ningún vehículo se escapa de esta parsimoniosa y lenta caravana de metal y gases. La caravana es la venganza lenta de la carretera. Carles Valls dixit.

jueves, 4 de diciembre de 2008

El despidísimo


Un amigo mío ha sido víctima de un despido salvaje: ¡no vuelvas mañana! Y el jefe no era un japonés de Nissan sino de un despachito profesional. Es difícil en el centro de trabajo encontrar el equilibrio entre la amistad y la profesionalidad, la productividad y la ilusión, el trabajo codo a codo y la relación personal, el beneficio de uno con el interés del otro, pero siempre se han de mantener las formas, ¿o no?. La dignidad del trabajador no se puede despedir. Carles Valls dixit.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Excantante


Estos últimos años me he olvidado de cantar. Hubo un tiempo en que cantaba mucho, cantaba en las misas, cantaba en las gradas de los campos de fútbol, cantaba junto el regazo de una guitarra, cantaba con los amigos de copas, sin embargo, ahora ¿dónde he perdido la voz de cantor? Ahora ya no canto más, sino que converso, dialogo o pienso en voz alta, pero no entono canciones. Tal vez algún día me plantee volver a afinar mis cuerdas vocales y recantar. Cuando una persona ya no canta, su vida se vuelve monocorde, pierde musicalidad y ritmo. Cantar es hablar con el corazón. Carles Valls dixit.

Empresas humanitarias


Estos días he visitado un holding de webs de empresas y, en su contenido institucional, defendían su responsabilidad social, laboral, ética o medioambiental, y todo ello me dejo confuso. En un momento dado dudé de si en vez de estar visitando la web corporativa de una empresa estaba mirando el portal de una ONG, de una fundación, de una organización ecologista o de un sindicato. ¿Es posible el capitalismo justo y solidario? ¿Una empresa es una ONG lucrativa? Carles Valls dixit.

martes, 2 de diciembre de 2008

Profesionales sin balón


Tengo amigos periodistas que se ganan los garbanzos con el fútbol. Ellos son los administrativos de la gran multinacional futbolera, compañeros que se ganan las lentejas locutando, comentando o escribiendo sobre el mundo laboral de la fábrica futbolera. Si embargo, ¿cómo es posible que el trabajo de once trabajadores en noventa minutos llene tantas portadas, artículos y tertulias? El fútbol es la primera multinacional del planeta. Carles Valls dixit.

La Justicia de papel


El peso de la Justicia se calcula en toneladas de papel. Kilos del expedientes, de formularios, de notificaciones, de sentencias, de recursos. La Justicia está empapelada. Carles Valls dixit.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Conversación digestiva


Quedar con un amigo para almorzar es uno de los placeres extraculinarios. La conversación, plato a plato, entre mordiscos, masticaciones, sorbos y degluciones, es siempre un buen condimento en la mesa. En la comida, el estómago conversa y la boca digiere. Carles Valls dixit.

Bombilleo navideño


La Navidad urbana es el reflejo luminoso de miles de bombillas encendidas. Sus calles, paseos y avenidas se electrifican con motivos navideños y la urbe se transforma en un gran árbol de luz. Sabemos que ya ha llegado la Navidad por el parpadeo de impresionantes rótulos luminosos de centros comerciales y por los collares de bombillas que abrazan las calles comerciales. La Navidad es eléctrica. Carles Valls dixit.

Funeral de la montaña



Ningún mortal se escapa de la muerte. El pasado viernes falleció mi tío con 71 años, estaba mal del corazón, pero todo el desenlace fue rápido e inesperado. La muerte no avisó. Uno tiene que ir acostumbrándose no sólo a vivir con sus vivos sino también a vivir con sus muertos. El cura recordó en el funeral algunos destellos de su vida, como su gran afición por la geografia y topografía del país. Mi tío murió en un sofá con la mirada a las montañas del Montseny, que tanto amaba. Disfrutar del paisaje es un homenaje terrenal del difunto. Carles Valls dixit.