miércoles, 22 de octubre de 2008

Bizcochineando


Un cuarteto de huevos, paletadas de azúcar, chorritos de aceite, una nevada de harina, levadura mágica, raspaduras saltarinas de limón. Para mi la cocina es como un laboratorio. Esta tarde he experimentado con el "pa de pessic" (bizcocho). Todo eso debe ser por culpa del bombardeo de cocineros mediáticos, del arsenal de instrumentos quirúrgicos de cocina que están todavía para estrenar, o del refinamiento de mi estómago que ya no se conforma con el calentamiento global de comida. Mi paladar me exige las recetas de mamá. Separar la clara de la yema, aquí está la cuestión. Carles Valls dixit.