martes, 18 de noviembre de 2008

Pobreza multicultural


Cuando viene a nuestro país un inmigrante pobre, entonces lo tenemos que segmentar y encuadrar según su raza, religión, sexo, costumbres culinarias, vestido, lengua, e higiene y aseo en general. Todo ello con la finalidad buenista de la sociedad de acogida de poder integrarlo, arraigarlo, no discriminarlo, hacerlo plenamente un ciudadano más. Por eso, una legión de pedagogos, políticos, asistentes sociales, educadores y antropólogos se encargarán del especímen para ayudarle a saber quién era, quién es y quién será. En cambio, si viene un inmigrante rico, ya no interesa nada ésto, y entra a formar parte directamente de la ciudadanía sin ninguna barrera multicultural. Yo cuando veo jugar a Etto, veo sólo a un jugador de fútbol y no a un negro, de un país africano y bla, bla, bla. La multiculturalidad es sólo un discurso para los inmigrantes pobres. Carles Valls dixit.