![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNVirYYtP6AqVQf-Vn0Ps7DFULcWdJR0c4hDI6L_an-D59BiLSAKx4jBePNOpwUahHWx-6CIXi9HMxx8gZGTcc-KXAUJW5sQI6RhtcVafwG4211PppIxsCl9ZURIhlLv2crIViKNhi73Od/s400/cubo.jpg)
A veces un currante está anonadado por el trabajo y recibe por sopresa la llamada de un amigo o familiar. Y, simplemente, comenta con él cosas insubstanciales desde el punto de vista laboral. Esta llamada es desestresante y aliviadora porque te hace olvidar, por unos momentos, que sólo existes para producir. La llamada ajena improductiva te hace feliz. Carles Valls dixit.