Hoy es el día 23 de abril, Sant Jordi, patrón de Cataluña, y día del libro y de la rosa. Y también día del supermatch, Barça-Manchester. ¡Demasiadas emociones juntas!
En cuanto al tema rosáceo, ya me han enviado una rosa corporativa del Colegio de Abogados que tengo anclada en el monitor del ordenador. Veremos a ver en qué manos femeninas acabará petalizando esa explosión roja. De momento, da un color alegre a mi desangelado despacho. Ahora sí que puedo decir que ondea la senyera en mi rincón laboral (al menos la del ramillete de la rosa).
Sobre la cuestión del libro, comentar que mi última adquisición fue la del Código Penal, que no se si es el más leído pero si el más aplicado en los Tribunales. Todavía no se si caer en el fenómeno del bestsellerismo y comprar el último libro de Zafón o, comprarme un libro- pack de películas subtituladas en formato DVD. Pero, ¿qué libro combina mejor con la balanceante rosa entre la muchedumbre de lectores y amantes advenedizos?
De momento lo que sí que puedo afirmar es que tengo más libros comprados en el Sant Jordi que acabaron en tentativa de lectura, que libros no adquiridos ese día libresco y, en cambio, leídos de cabo a rabo.
Sant Jordi siempre es una compra compulsiva de libros sin deslomar, un jardín de rosas ambulantes efímeras, y el dragón... ya lo veremos en el Camp Nou con la camiseta del Manchester, henchido de cerveza subvencionada. Carles Valls dixit.