martes, 13 de mayo de 2008

La emoción salsera


En el corazón de la plaza Cataluña un grupo de músicos cubanos interpretaron varias canciones. Y se formó un pequeño Buenavista Social Club al lado de las Ramblas. Y la emoción recorrió mi cuerpo como hacía tiempo que no pasaba. Un grupo de la tercera edad improvisaron unos bailes con pasión y alegría mientras el resto de los oyentes escuchaban ese ritmo cálido y sabroso. Entonces recordé nostálgicamente, que no hacía mucho tiempo, yo también había sido salsero y disfrutado de la magia del baile en noches eternas. Y deseé que cuando llegase a la ancianidad también fuese como esos bailadores seniors con el cuerpo arrugado y el alma joven. Mi corazón siempre será salsero. Carles Valls dixit.